Las Floraciones de Algas Nocivas (FANs, también conocidas como blooms o más comúnmente como marea roja) en canales y fiordos del sur de Chile, son provocadas por diversos tipos de microalgas y han tenido un marcado incremento en las últimas décadas tanto en intensidad, frecuencia y cobertura geográfica, lo que conlleva graves consecuencias en los recursos costeros, economía local y salud pública.
Con la llegada de la época estival y con el consiguiente cambio en las condiciones meteorológicas y oceanográficas que ella produce, aumentan las probabilidades de ocurrencias de FANs, por lo que es necesario conocer el estado actual de estas, y disponer de proyecciones de corto plazo en áreas que sostienen salmonicultura, mitilicultura y extracción de recursos.
En entrevista con AQUA, Pamela Carbonell, quien es investigadora del Centro de Estudios de Algas Nocivas (CREAN) del Instituto de Fomento Pesquero (IFOP), explica que el otoño-invierno de este año en canales y fiordos mostró condiciones oceanográficas estables, con poca alteración en variables como temperatura y salinidad, lo que se traduce en una baja ocurrencia de floraciones.
«Hasta mediados de noviembre, las regiones de Los Lagos y de Aysén no presentaron grandes abundancias de microalgas nocivas, manteniéndose los estados de alerta en condición normal, sin embargo, en la región de Magallanes la situación fue diferente, pues se han presentado floraciones de la microalga Alexandrium catenella asociadas a la toxina paralizante, tanto en la provincia de Última Esperanza en el extremo norte de esta región, como en el sector del canal Beagle, en el extremo sur de Magallanes, particularmente durante el mes de octubre», detalla la científica del CREAN.
A su vez, precisa que la condición normal indicada en primavera para la región de Aysén ha ido cambiando a medida que se fue acercando el mes de diciembre, aumentando paulatinamente las abundancias de A. catenella principalmente en las zonas sur y norte de Aysén, donde los estados de alerta han sido calificado de precaución moderada; contrario a lo sucedido en la región de Los Lagos, donde hasta principios de diciembre las abundancias de esta microalga se han mantenido en niveles bajos, es decir, en una condición de normalidad.
Por otro lado, complementa Pamela Carbonell, se ha visto en años previos, además de lo que evidencian los modelos desarrollados por el IFOP, que el incremento en la abundancia de esta microalga en la región de Aysén podría, según las condiciones meteorológicas, particularmente vientos, favorecer el traslado de microalgas desde el norte de Aysén (Moraleda y Melinka) hacia el sur y sureste de la isla de Chiloé (región de Los Lagos), incrementando la abundancia de A. catenella en esta zona.
«Este pronóstico adquiere aún más relevancia si se consideran las predicciones de la NOAA (Administración Nacional Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos) y CIIFEN (Centro Internacional para la Investigación del Fenómeno de El Niño), además de numerosos modelos predictivos que pronostican una alta probabilidad de un periodo El Niño, que si bien sería de carácter moderado, podría condicionar el desarrollo de diferentes floraciones en los fiordos y canales del sur de Chile», subraya la representante del CREAN, enfatizando que los «pronósticos orientan a que en ningún caso la intensidad y cobertura geográfica de las floraciones de A. catenella sean comparables con aquellas ocurridas en el otoño de 2016″.
CREAN
Desde su fundación en septiembre de 2017, el Centro de Estudios de Algas Nocivas del IFOP ha permitido consolidar un trabajo iniciado a mediados de la década de los años noventa con grupos de trabajo en las regiones de Los Lagos, Aysén y Magallanes, y además ha incrementado sustancialmente sus capacidades, constituyéndose en un centro de cobertura nacional, no tan solo en el ámbito del monitoreo y prevención de eventos FAN en Chile con la incorporación de distintas variables como la medición de nutrientes en más de 170 estaciones de muestreo, implementación de nuevas técnicas para la detección de toxinas a través de cromatografía, o la incorporación de programas de monitoreo permanentes desde la región de Bíobio hacia el sur, sino que también en el ámbito de la ciencia con la implementación e incorporación de técnicas moleculares para detección de especies nocivas, laboratorios para estudios ecofisiológicos y cambio climático, laboratorio biogeoquímico y laboratorios para el desarrollo de técnicas de detección de toxinas que afectan a peces, entre otros.
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En este marco, Pamela Carbonell destaca que también se ha avanzado en el desarrollo de un plan de difusión que acerque, informe y eduque acerca de FANs a diferentes públicos objetivo de la sociedad y el cual comprende distintos medios, como aplicaciones para teléfonos celulares y tablets, difusión de resultados y noticias relacionadas a FANs a través de redes sociales (Facebook, Twitter), desarrollo de material audiovisual y educativo, además de visitas a colegios, caletas de pescadores y comunidad en general.
«Actualmente, el CREAN participa en el desarrollo de estudios con universidades e institutos japoneses, y diversas universidades nacionales, y no obstante la diversidad y complejidad de las floraciones que se presentan a lo largo del país, el CREAN constituye un pilar importante de diagnóstico, apoyo, generación de conocimiento y entrega de opiniones fundadas sobre las floraciones de algas nocivas y toxinas marinas en el país», concluye la investigadora.
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