Estados Unidos: Gobernador de Florida pide declarar emergencia federal por algas nocivas

Jul 15, 2016

Numerosos peces han aparecido muertos en las aguas de los canales infestados de algas.

(El Nuevo Herald) El Cuerpo de Ingenieros del Ejército ha comenzado a reducir el caudal de agua que desaloja del lago Okeechobee, de Florida, hacia el estuario de Caloosahatchee River, en el suroeste del estado, en un esfuerzo por frenar la proliferación de algas tóxicas, informó este viernes 15 de julio un medio local.

La zona de canales que integran el importante estuario del Caloosahtchee River se ha visto afectada por un brote de algas verdes tóxicas y malolientes a raíz del vertido masivo de agua procedente del citado lago.

El jueves pasado, numerosos peces aparecieron muertos en las aguas de los canales infestados de algas, similares en su apariencia a las algas tóxicas visibles en la costa este del estado, recogió el canal Wink News.

«Esto es lo peor que he visto en los 25 años que llevo aquí», señaló a este medio David Meracle, vecino de Sanibel, en la costa suroeste de Florida.

La alarma y crisis ecológica creada por la proliferación de algas tóxicas en playas, canales y lagunas del estado llevó al gobernador de Florida, Rick Scott, a pedir la urgente declaración de emergencia federal, y, de esta manera, contar con los recursos necesarios para combatir el grave problema de contaminación creado por estas algas.

Funcionarios y expertos del suroeste de Florida se reunieron este jueves con miembros del Congreso y agencias federales para impulsar un plan conjunto que permita la erradicación de estas algas en las zonas afectadas.

«Mis electores dependen y merecen agua limpia, sin tener que esperar décadas para alcanzar eso», dijo el representante Curt Clawson, quien aseguró que la situación ya «no es sostenible».

El reciente registro de disminución de precipitaciones, aumento de la evaporación del agua y almacenamiento del líquido en la cadena de lagos del Kissimmee ha contribuido reducir el nivel de agua en el lago Okeechobbe.

Esto ha permitido reducir el flujo de agua del lago hacia zonas del este y oeste del estado a través del viejo dique Herbert Hoover, que rodea el gran lago Okeechobee y resulta incapaz de almacenar las aguas cuando la lluvia arrecia, por lo que tiene pendiente reparaciones y ampliaciones que eviten inundaciones en pueblos aledaños.

La última reducción del flujo por parte de Cuerpo de Ingenieros supuso una ligera disminución de 3,000 pies cúbicos por segundo a 2,800.

Aún así, el objetivo es reducir la proliferación de algas, destacó el Cuerpo, pero, por el momento, el Departamento para la Protección del Medioambiente de Florida instó a niños y ancianos a «no entrar en contacto con las algas que han sido detectadas en varios lugares del suroeste del estado».

Presione aquí para leer la nota desde su fuente original en El Nuevo Herald.

Lo último
Te recomendamos

REVISTA DIGITAL

[latest_journal_single_iframe]