(Mundo Ejecutivo) El alza en el precio del dólar y los efectos climáticos globales empujan a que los costos de producción de la industria atunera se vean afectados, sostienen productores.
El precio dólar impactó desde dos puntos: porque el precio internacional del atún se cotiza en dólares, y por el clima derivado del efecto de «El Niño», el cual desde el año pasado generó una reducción en el volumen de pesca, subraya el gerente de Ventas del Grupo Marítimo Industrial (Grupomar), Roberto Rivas.
Dicha situación, aseguró, obligó a la empresa a pescar atún en aguas internacionales, lo que incrementó los costos y finalmente se reflejó en aumento en el precio de hasta 30% en promedio, sobre todo en los productos más populares de la marca.
«Al pescar en aguas internacionales, todo se cotiza en dólares, lo que provoca encarecimiento», explicó.
Rivas anotó que a lo anterior se suma que el precio del aceite es un commodity y por tanto se cotiza en dólares, y a que la hoja de lata se importa de países asiáticos como Japón y China, lo cual en conjunto provocó un aumento de 30% en los costos de producción del atún.
Pero agregó que pese a ello el consumo de atún no disminuye en países como México, debido a su alto valor nutritivo y por ser práctico para transportarlo.
Expuso que la expectativa de Grupomar es mantener este año los precios al consumidor final, pese a que hay presión en los precios internacionales del atún, por asuntos climáticos.
El presidente y fundador de Grupomar, Antonio Suárez Gutiérrez, recordó que por el fenómeno climático de «El Niño», el año pasado la pesca mexicana disminuyó casi 20%, y la empresa se vio obligada a pagar licencias internacionales para pescar en aguas de otros países como Perú y Costa Rica.
«Había riesgo de no encontrar buena pesca, pero afortunadamente fue exitosa y se obtuvieron 2.500 toneladas de atún», anotó.
De igual manera, afirmó que Grupomar continuará apostando por México con productos de innovación e inversiones, toda vez que el país tiene un amplio potencial para crecer pese a las vicisitudes internacionales e internas.
Por lo anterior, detalló que su empresa invertirá este año en el país norteamericano $1.000 millones de pesos mexicanos (US$54 millones), lo cual permitirá generar hasta 500 nuevos empleos directos para sumar 3.000 plazas laborales.
El empresario pesquero explicó que la inversión está destinada a un nuevo proyecto integral de sardina ubicado en Ensenada, Baja California, por $500 millones de pesos mexicanos (US$27 millones), el cual se prevé arranque en agosto próximo con una capacidad de producción inicial de 20.000 toneladas anuales en lata clásica y filetes.
En 2016, la empresa comercializó 7 millones de cajas de sus diferentes productos, y en 2017 el pronóstico es de hasta 8,4 millones de cajas.
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