Durante el mediodía de este viernes 16 de octubre en Concepción (Región del Biobío), el subsecretario de Pesca y Acuicultura, Raúl Súnico, se reunió con funcionarios de la Dirección Regional del Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura (Sernapesca) para brindarles su apoyo y respaldo ante las presiones y hostigamientos que en la última semana han sufrido y que tienen relación con la investigación de harina de pescado sin origen legal que se está llevando a cabo en la zona.
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La autoridad sectorial afirmó que «el equipo de Sernapesca cuenta con todo el respaldo para investigar y rechazamos cualquier acto de presión u hostigamiento que entorpezca su labor fiscalizadora. Este Servicio, en conjunto con la Subpesca (Subsecretaría de Pesca y Acuicultura), trabaja por la sustentabilidad de la actividad pesquera y el subreporte, la pesca ilegal y la pesca no declarada atentan contra este objetivo».
En el caso del hallazgo de mercado negro de la harina de pescado denunciado recientemente, se estima que se habrían usado al menos 40.000 toneladas de sardinas y anchovetas por fuera de la cuota de pesca legalmente permitida para este año.
Denuncia
Este jueves, en tanto, el Sernapesca ingresó una denuncia en el Juzgado de Letras de Coronel contra la pesquera Bahía Coronel S.A. por la entrega de información no fidedigna. Lo anterior se suma a las denuncias realizadas también por el Sernapesca contra la empresa comercializadora Salmones Chile S.A. y el decomiso de 7.000 toneladas de harina de pescado sin acreditación de origen. Ambas compañías pertenecen al holding encabezado por el empresario Francisco «Fra Fra» Javiera Errázuriz.
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El director regional (S) del Sernapesca de la Región del Biobío, Rodrigo Valencia, puntualizó que «la pesquera Bahía Coronel puede operar, procesar y vender harina siempre y cuando lo haga en el marco de la legalidad», esto tras las denuncias de cesantía que estaría provocando la investigación.
La autoridad regional ahondó que «lo único que no se ha permitido a Bahía Coronel es la exportación de dos cargamentos de jurel y jibia que actualmente mantiene en bodega y cuya documentación está incompleta, por lo que no es posible determinar la trazabilidad de ese recurso, para garantizar que fue extraído legalmente y por ende no podemos dar la autorización para su exportación».
La pesca ilegal es uno de los principales problemas que enfrenta el sector pesquero teniendo en cuenta la delicada situación de conservación por la que pasan 16 especies de importancia económica en nuestro país. Por su parte, según antecedentes de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por sus siglas en inglés) la pesca ilegal y no declarada es el tercer negocio fraudulento más relevante del mundo tras el tráfico de armas y de drogas.