Fran Aguirre y Danae Varela, de 12 años, trabajaron en el laboratorio del Centro de Investigación y Desarrollo Tecnológico en Algas de la Universidad Católica del Norte (UCN), en la región de Coquimbo.
Asesoradas por su directora, Fadia Tala, descubrieron que el contenido de sodio de algas parda, roja y verde es mucho menor al de la sal común. Es así como su próximo paso será elaborar sal de algas para hipertensos; pero el proyecto les dejó mucho más.
«Las niñas adoran a su científica asesora, porque les abrió las puertas, las llevó a terreno y siempre estuvo dispuesta a resolver sus dudas», comentó a El Mercurio la profesora Noris Villarroel.