Tras el llamado de turistas y visitantes de las localidades de Puerto Viejo, Playa Las Salinas, Chañaral y Baranquilla, el Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura (Sernapesca) de la Región de Atacama desplegó su unidad de rescate para atender tres popes de lobo de mar y una cría de chungungo halladas en condición vulnerable.
La alerta fue dada a través de la línea 800 320 032 del Sernapesca, que atiende las 24 horas del día. Los ejecutivos de atención dieron aviso a la Dirección Regional quienes a su vez activaron sus planes de contingencia y acudieron a las playas donde se produjeron los varamientos.
Luego de una revisión en terreno, los animales fueron trasladados a la Clínica Veterinaria de la Municipalidad de Caldera, donde se les suministró suero fisiológico como primera medida de estabilización, ya que los cuatro ejemplares aún están en período de amamantamiento.
Posteriormente, en coordinación con la Unidad de Rescate Animal de la Dirección Nacional (en Valparaíso) y con la Dirección Regional del Sernapesca Valparaíso, se gestionó el traslado del pequeño chungungo a las instalaciones de la Agrupación Ecológica Chinchimén, especializada en la atención y cuidado de la también llamada «nutria de mar».
En un esfuerzo público-privado, se solicitó la colaboración de la empresa aérea LATAM-Cargo, la cual accedió a trasladar el chungungo de manera gratuita hasta la Región de Valparaíso.
Las tres crías de lobo marino, en tanto, fueron derivadas al hospital veterinario de la Universidad Santo Tomás en Viña del Mar, donde se encuentran en buenas condiciones y en proceso de recuperación. El pequeño chungungo ya está en su nuevo hogar en la Agrupación Chinchimén de Maitencillo, organismo con el que Sernapesca recientemente firmó un convenio de colaboración.
El director regional del Sernapesca Atacama, Guillermo Mery, destacó el exitoso operativo, y manifestó que «este tipo de alianzas y el trabajo conjunto y solidario con empresas como LATAM, resultan vitales para el cuidado y recuperación de la fauna marina, en particular en regiones donde no existen centros especializados para su cuidado y atención, como ocurre en Atacama».