El día domingo 6 de marzo, la Armada detectó a dos lanchas con restos de especies salmonídeas que supuestamente provendrían de lotes de mortalidad que habrían sido depositados por compañías del rubro en el área cercana a Ilque (localidad ubicada a 18 kilómetros de la ruta que va desde Puerto Montt a Calbuco bordeando el golfo de Reloncaví en dirección poniente).
Tras conocer el hecho, la Fiscalía Local de Puerto Montt determinó iniciar una investigación para esclarecer el origen de estos salmones y si existe responsabilidad por parte de salmonicultoras en un manejo inadecuado tras la Floración de Algas Nocivas (FAN) que generó, según los datos del Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura (Sernapesca), la muerte de aproxidamente 24 millones de peces, equivalentes a 38.500 toneladas; es decir, cerca de un 15% de la producción esperada para este año.
Fue así que la semana pasada el fiscal Marcelo Maldonado González confirmó la orden para que la Brigada de Delitos Medioambientales (Bidema) de la Policía de Investigaciones (PDI) de Valdivia realizara las diligencias, y subrayó que «ante el hallazgo de dos lanchas con restos de ejemplares salmonídeos, esta fiscalía se abocó a investigar el origen de dichas especies, verificando por declaración del dueño de las embarcaciones involucradas que podrían proceder de mortalidades de salmón dejado por compañías productoras».
En la Asociación de la Industria del Salmón de Chile A.G. (SalmonChile), entidad que representa a más del 70% del cultivo de salmónidos en el país, salieron al paso de los cuestionamientos y este lunes 28 de marzo aseguraron que las «productoras destinaron toda la mortalidad provocada por el evento FAN a su reducción en harina de pescado o a vertimiento en lugares autorizados por la autoridad. En ningún caso estos residuos fueron destinados por las empresas a consumo humano», enfatizó el gremio.
De igual manera, sostuvo que la detección realizada por personal de la Armada con producto que presuntamente sería comercializado para consumo humano, «no corresponde a lo dispuesto por la autoridad y las compañías, y se debe investigar su procedencia y cómo se obtuvo o sustrajo, y en caso de ser efectivo, debe identificarse a los responsables y aplicárseles todo el rigor de la ley», concluyeron desde SalmonChile.
En tanto, el fiscal Maldonado ha mencionado que «de verificarse que existe por parte de las empresas salmonicultoras un manejo inadecuado del producto que proviene de mortalidades, y que esto tiene graves consecuencias en la población, se podría configurar un ilícito penal de delitos contra la salud de las personas».