En su etapa final se encuentra el proyecto que apunta a una transferencia tecnológica efectiva a caletas de pescadores artesanales de la región de Los Lagos, fundamentalmente para beneficio de las mujeres y sus familias, que podrían contar con una nueva fuente de ingresos económicos.
La innovadora iniciativa la comenzó a ejecutar Fedepesca con apoyo del académico del Departamento de Acuicultura y Recursos Agroalimentarios de la Universidad de Los Lagos (ULagos) Pedro Vergara, biólogo marino, y cuenta con financiamiento del Fondo de Administración Pesquera (FAP) que ahora depende del Indespa (Instituto de Desarrollo Sustentable de la Pesca Artesanal y de la Acuicultura de pequeña Escala). En la primera etapa se logró reducir significativamente el tiempo de engorda de puyes para su posterior comercialización en el extranjero.
El proyecto “Desarrollo de prototipo de engorda de puyes (Galaxias spp.) cristalinos y transferencia tecnológica a caletas de pescadores 
artesanales» partió con el desafío que planteó el presidente de Fedepesca, Rubén Casanova, al académico de la ULagos, identificando los mercados español y asiático que demandan esta especie de puyes presentes en estuarios de gran parte del sur de Chile. Sin embargo, las características de estos peces hacen que su posibilidad de vida sea menor ya que son presa fácil de otros peces y de aves de orilla.
“Nosotros planteamos generar un sistema de engorda de puyes juveniles, de unos 2 o 3 centímetros y engordarlos hasta 6 centímetros, antes de que comiencen a pigmentarse. Esa etapa de manera tradicional se extiende entre 2 y 3 meses, sin embargo, pensamos en que si los tomamos recién eclosionados y los engordamos a unos 6 centímetros, tal vez disminuimos la mortalidad natural, ya que muchos de ellos mueren en ese periodo de su vida, principalmente porque se los comen otros”, explicó el académico Pedro Vergara.
Para llevar a cabo el proyecto fueron recolectados alrededor de 2 mil puyes en el río Contaco, los que fueron depositados en las instalaciones de Metri. “Nos dimos cuenta que en un mes podíamos engordarlos y no en 3 meses que se demoraban habitualmente. Con el agua salada solucionamos el problema de hongos que se producen en el agua dulce. Los alimentábamos con el flujo de agua de mar que llega de Metri que trae en su interior plancton, además de pellet de salmón de pequeños tamaños y su tasa de crecimiento fue muy alto, pasando en un mes una larva desde los 2 centímetros a los 5 o 6 centímetros”, sostuvo el académico.
Lo que viene ahora, según comentó el profesional del proyecto, es trasladar los resultados de la iniciativa a la pesca artesanal y hacer una transferencia tecnológica efectiva. Se conformará una cooperativa con las personas interesadas en replicar este proyecto, quienes estén asociados a Fedepesca, institución que junto con la ULagos respaldarán a las personas a dar los primeros pasos. “Necesitamos que tengan acceso a agua para hacer sus cultivos, un espacio para colocar los estanques y se les proveerá las primeras unidades de puyes. Aquí quienes tendrán las mayores posibilidades de trabajar serán las mujeres, quienes muchas veces son dueñas del territorio. Este es un producto de muy alto costo, el kilo puede bordear los 60 mil pesos”, detalló Vergara.
Se espera que durante los próximos meses quede conformada esta cooperativa para comenzar a trabajar en una especie que cuenta con gran prestigio, especialmente en los consumidores extranjeros, que están dispuestos a pagar un alto valor por el producto.