Actualmente, los mercados internacionales están muy sensibles sobre el uso de antibióticos en el cultivo de salmónidos. De hecho, se ha convertido en un desprestigio a la «marca» Chile. Producto de lo anterior es que esta situación se ha convertido en una de las razones por las cuales en los supermercados, fundamentalmente de Estados Unidos, los clientes están pagando entre US$2-US$5/kg más por un filete de origen noruego respecto de uno nacional.
«Vemos una campaña de permanente desprestigio, ya que cada vez que Oceana pide apertura de la información de consumos de antibiótico terminamos en el Consejo para la Transparencia y en los juzgados para mantener oculta la información. Lamentablemente, eso hace pensar que estamos en algo ilegal y tiene mucha cobertura de los medios», reconoce el gerente general de Nova Austral, Nicos Nicolaides.
Según se detalla a AQUA, la historia muestra que Noruega sufrió el mismo problema hace casi 20 años, cuando los salmones comían más kilos de antibióticos que todos los habitantes del país juntos. Pero los noruegos enfrentaron y resolvieron el problema. Por ello, se dice que la razón que la industria salmonicultora de la nación nórdica no use antibióticos no es una casualidad o producto de la «buena suerte», sino que es el resultado de un trabajo consciente y constante. De hecho, casi todos los años les aparece un nuevo desafío de enfermedades e inmediatamente buscan soluciones que eviten el consumir antibióticos.
En este escenario, Nova Austral decidió ser la primera empresa chilena en producir salmón sin uso de antibióticos. «Es una decisión audaz y valiente, pero que nos tiene a todos muy motivados y enfocados», confirma Nicolaides. Y para esto, la firma ligada al Grupo EWOS creó un equipo interno de profesionales cuya tarea inicial fue desarrollar la estrategia y planes que les permitan lograr este importante desafío.
Este equipo técnico, liderado por el jefe de Salud de Nova Austral, Marcelo Brossard, cuenta -entre otros- con el aporte de Arturo Schofield, gerente de Producción; Daniel Zamora, veterinario de la compañía; y Alejandro Medina, subgerente de Agua Dulce. A principios de año, realizaron un detallado análisis de las distintas enfermedades que históricamente han afectado a los salmones que la empresa cultiva en las aguas patagónicas, al sur del estrecho de Magallanes (Región de Magallanes). Luego, basados en el conocimiento y la experiencia de colegas en el resto del país y del mundo, especialmente de Noruega, con el apoyo de EWOS y de laboratorios como Novartis, elaboraron un estricto protocolo de buenas prácticas y medidas preventivas. Estas medidas se inician desde la obtención de las ovas, incluye todas las etapas de cultivo de los alevines en agua dulce, el traslado al mar y, por último, la etapa de engorda. Se debe recordar que el cultivo de salmones dura aproximadamente dos años y medio, de los cuales uno es en agua dulce y el resto en el mar.
«Los resultados definitivos y de largo plazo de todo este plan se irán viendo en el tiempo, ya que los primeros peces con el 100% de las medidas contenidas en el plan serán sembrados durante el último trimestre de este año. Sin embargo, a los peces que se encuentran en proceso de engorda en el mar, se les han aplicado las recomendaciones correspondientes a dicha etapa, las que consideran una nutrición óptima y cuidado intenso de niveles bajos de stress, entre otras», agrega el gerente general de Nova Austral.
En ese sentido, Nicolaides destaca que la empresa se encuentra «muy orgullosa de los resultados logrados hasta el momento, en que en los primeros nueve meses del año ha debido realizar un tratamiento, en solo uno de los diez centros que actualmente tienen peces. Esto representa un consumo equivalente a 7,7 g de antibiótico por cada tonelada de salmón producido (el promedio de la industria chilena es de 700 g/t). Además, han pasado siete meses en que no se ha realizado absolutamente ningún tratamiento con antibióticos», asegura el ejecutivo.
En un trabajo silencioso, Nova Austral ha organizado visitas de organizaciones no gubernamentales y casas certificadoras a conocer este trabajo. «Los más impresionados han sido clientes de Europa y de Estados Unidos, quienes al visitar los centros de cultivo más australes del mundo, y ver que con un trabajo profesional y con una visión de sustentabilidad, se posiciona a esta empresa como la mejor en Chile, al nivel de los mejores del mundo», enfatiza Nicos Nicolaides.
Por último, detalló que en agosto de este año se reunieron con los clientes más exigentes, que han reducido la compra desde Chile por este tema. «Les contamos que en Chile existe una alternativa para abastecerse de este excelente producto, cultivado sin usar antibióticos ni pesticidas. Fuimos muy bien recibidos y felicitados. Lo más interesante de todo fue que clientes como Costco nos dijeron que cuando estemos cosechando ‘salmón nunca tratado’, lo que esperamos ocurra en abril próximo, nos incluirán en el selecto grupo de proveedores que reciben precio premium, es decir, nuestro salmón sin antibióticos no le quita espacio de mercado al de nuestros colegas, sino que a los noruegos», concluyó el gerente general de Nova Austral.