En el marco del programa de evaluación de la ley de pesca impulsada por el Gobierno para recoger las posturas de los distintos sindicatos de pescadores de la región del Biobío, en la sede de Talcahuano de la Ferepa se reunieron decenas de asociados interesados en exponer y hacer presente lo que les perjudica del actual cuerpo legal.
El taller fue liderado por el director zonal de Pesca y Acuicultura, Javier Valencia (en la foto).
Uno de los primeros temas planteados fue lo relacionado con el Registro Pesquero Artesanal (RPA), en donde los asistentes señalaron la falta de sentido que existe entre el RPA del pescador y el RPA de la embarcación. Esto, a su juicio, no les permite trabajar libremente, ya que tienen autorización para determinadas pesquerías, lo que limitaría sus posibilidades económicas.
En torno a las áreas de manejo, las denuncias se relacionaron con quienes obtienen espacios para el cultivo de recursos bentónicos. En esta línea, se pidió que la autoridad marítima y de la Subsecretaría de Pesca y Acuicultura (Subpesca) evalúe la efectividad de quienes han tenido un cultivo y están solicitando otros espacios, sin que se analicen los resultados alcanzados.
«En el fondo, mayor fiscalización en los logros y menos tramitación en la concesión de quienes efectivamente ven en el área de manejo una posibilidad de sustentabilidad de recursos y de beneficio económico para los asociados en el cultivo», puntualizó Hugo Arancibia de la Federación de Pescadores Artesanales de la Región del Biobío (Ferepa Biobío).
Tras el encuentro con la autoridad, la Ferepa Biobío emitió una declaración que a continuación reproducimos íntegramente:
«Seguridad para los buzos
Incorporar a la ley la plataforma social para los pescadores artesanales y declarar como trabajo pesado el quehacer de los buzos y ayudantes de buzo para que al menos, a los 60 años puedan dejar la actividad y acogerse a una jubilación mejorada.
Se propone derogar el Decreto 408; eliminar de la exigencia el uso de un observador a bordo para embarcaciones artesanales; establecer restricciones para embarcaciones menores de 12 metros de eslora que se dedican a la pesca pelágica dentro de una milla marina de la costa, como la implementación de certificación de las capturas, cubicaje de la bodega (no cargar más de 15 toneladas de carga por vuelta de viaje).
Otro punto relevante de mencionar al respecto dice relación con el explosivo aumento de embarcaciones que en la actualidad se construyen menores a 12 metros de eslora y con capacidades de bodega de hasta 60 toneladas, que a la larga se transformará en un despropósito de la visión inicial en la medida restrictiva a que se hace mención en la ley.
Jibia y apertura de registro
En el caso del recurso jibia, la pesca artesanal tiene asignado un 80% del total nacional, pero solo captura el 52% de su cuota asignada. Hay un porcentaje que no se captura y proponemos abrir los registros para la inscripción en esta pesquería a los pescadores que están en lista de espera y cumplir así con la cuota asignada al sector.
Las cinco millas para embarcaciones de hasta 18 metros
Resulta poco comprensible que en algunos aspectos la ley consagre un beneficio para un sector, en este caso la industria, en desmedro del otro, como son los pescadores artesanales en relación al acceso fuera de las 5 millas. Una parte importante del sector artesanal, embarcaciones de hasta 18 metros, cumple con las mismas exigencias tecnológicas que posee el sector industrial (posicionador satelital, pago de patentes pesqueras, certificación de desembarques, entre otros), pero no le permiten actuar más alla de las cinco millas en un claro trato discriminatorio.
Licitaciones
Que el Rendimiento Máximo Sostenible (RMS) se redistribuya en forma equitativa. El sector industria tiene mayores posibilidades en la licitación de estos excedentes pesqueros, lo que le permite quedarse con la totalidad del excedente, por lo que proponemos que sea equitativo con un 50% para cada sector.
Otro de los temas abordados fue el de eliminar la renovación automática de las licencias transables que hoy aplica a la industria. Proponemos modificar este punto de la ley de pesca mediante un mecanismo que termine con la perpetuidad de estos derechos para ese sector.
Eliminar la pesca de arrastre
Antecedentes a nivel mundial ratifican el daño que la pesca de arrastre genera en los ecosistemas marinos, y en particular en nuestras costas. Este tipo de práctica ha tenido consecuencias desastrosas, por lo que exigimos se elimine este arte de pesca en todo el litoral chileno».