El miércoles 8 de marzo de este año, Corpesca S.A. informó que durante 2016 registró una diferencia entre el valor recuperable de sus activos y su valor libro ascendente a US$57,5 millones, generando una pérdida por deterioro de activos por dicho monto.
La pesquera controlada por el grupo Angelini argumentó que «el deterioro fue determinado por las condiciones del mercado, la disponibilidad de pesca y de producción considerada por la empresa en cumplimiento de las normas internacionales de información financiera, y está asociado principalmente a naves y otros activos que se encuentran no operativos o con baja utilización proyectada. Todo esto generó un cargo neto a resultados en el ejercicio 2016 de US$44,7 millones».
Fue así como la compañía anunció que su directorio propondría en la junta de accionistas de abril un aumento de capital de US$90 millones, «cuyo propósito es fortalecer la posición financiera de la Sociedad, posibilitando principalmente la diminución de su actual carga de deuda»; situación que fue aprobada por los accionistas y que se confirmó recientemente con el documento de inscripción en la Superintendencia de Valores y Seguros (SVS).
En esa línea, Corpesca explicó al ente regulador que los fondos que se obtengan con esta emisión de acciones de pago nuevas «se destinarán a fortalecer la posición financiera de la Sociedad y los recursos que se obtengan con el mismo, se destinarán principalmente a disminuir los pasivos directos de la matriz pesquera, permitiendo reducir el índice de endeudamiento de la compañía».
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