(SoyChile) Todo el borde costero de dos comunas de la región de Los Lagos abarca la petición de concesión marítima solicitada por el lonko Eric Vargas Quinchamán a nombre de 15 comunidades indígenas, a través de la «Ley Lafkenche».
La solicitud ingresó a la Subsecretaría de Pesca y Acuicultura (Subpesca) el jueves 10 de agosto y abarca desde Caleta La Arena hasta Pargua, considerando todo el borde costero de Puerto Montt y Calbuco.
El planteamiento es inédito, porque no se ha conocido de una petición de esta magnitud desde que entró en vigencia la legislación de Espacios Costeros Marítimos de Pueblos Originarios (ECMPO), más conocida como «Ley Lafkenche».
La ley comenzó a regir en el año 2008 y permite que las comunidades originarias puedan solicitar concesiones marítimas apelando a su uso ancestral.
La situación ya está en conocimiento de varias organizaciones de la pesca artesanal entre Puerto Montt y Calbuco, porque la situación que inquieta es que si la solicitud es declarada admisible, mientras se realiza el proceso de demostrar que en ese territorio hubo uso ancestral, quedan detenidas todas las peticiones de concesiones públicas o privadas.
Si se da a lugar a la admisibilidad de la concesión, tampoco se podrán ingresar nuevas solicitudes, y menos habrá intervenciones en el borde costero.
El lonko Eric Vargas Quinchamán explicó que la idea es recuperar para las comunidades estos espacios ancestrales para los pescadores y el turismo, «pero principalmente para los mapuches y huilliches, para que la gente del territorio tenga una opinión cada vez que venga una empresa a instalarse».
De acuerdo con el lonko, la «Ley Lafkenche» no es nueva, lleva varios años y lo que se hizo fue considerar un derecho, porque lo que se busca es proteger el borde costero.
«El tema de fondo es la protección de las aguas interiores. Claro, el trámite inicial demora algunos días tras hacer la presentación en la Subsecretaría de Pesca, pero estamos dispuestos a esperar», argumentó Eric Vargas.
Para el lonko esta es una medida legítima, que busca terminar con los problemas de contaminación, para poder recuperar y cuidar los recursos naturales marítimos.
«Producto de la contaminación que generan las industrias era obvio que nuestra gente iba a reaccionar, porque queremos garantizar a los pescadores artesanales, sus áreas de manejo, a los caladeros y en los puertos, y estamos dispuestos a conversar y llegar a todos los acuerdos amparados en esta ley», adujo.
Marcelo Soto, presidente de la Federación de Pescadores de Calbuco, dijo que lo primero es acercarse a los pueblos originarios y en este caso con el lonko Eric Vargas que lleva adelante esta petición de una extensa área costera.
El dirigente señaló que el pueblo originario está en todo su derecho, ya que hay una ley que los ampara y por lo tanto a raíz de esta «ellos pueden pedir lo que quieran y no tenemos ningún reparo, aquí el reparo es contra el Estado, el Gobierno y los legisladores, para que esta situación se pueda zanjar, y las resoluciones se puedan hacer en forma rápida», subrayó.
Para el dirigente de la pesca en Calbuco, la situación pasa por aunar el trámite, acortar el tiempo de espera y subsanar esto rápido para entregar la concesión a los pueblos originarios, siempre y cuando no afecte al mundo productivo.
«Nadie está en contra de esta solicitud, sino que en contra de los plazos, que se deben acortar a la brevedad. Hemos estado trabajando con los senadores, entre estos Rabindranath Quinteros para que se abra el debate sobre esta materia, porque no hay claridad», aseguró.
Luis Vargas, presidente del Sindicato de Pescadores de Caleta La Arena, manifestó que las autoridades deben solucionar esta disyuntiva, porque existe una solicitud de protección de la caleta como sindicato San Pedro.
Vargas explicó que ello está en pleno trámite en la autoridad marítima y el Sernapesca, pero lleva más de tres años.
«Esta situación nos podría afectar, y por ello nos queremos acoger a la nueva ley de caletas. Contamos con nuestra área de manejo desde el 2009, y tenemos entendido que con ello no habría problemas. Ojalá el lonko se comunique con nosotros porque es bastante complicado, porque si no tiene conocimiento de lo que hacen los pescadores, es necesario que se informe, porque nosotros llevamos más de 100 años en este lugar. Yo no me puedo oponer a esta situación, pero hay que estudiarla», sentenció el dirigente.
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