Hasta la comuna de Curarrehue, en la región de La Araucanía, llegó la directora general de la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE), Dra. Monique Eloit, acompañada por la directora nacional de Sernapesca, Alicia Gallardo. La visita a la piscicultura «Catripulli» de AquaChile en la zona denominada «la maternidad del salmón» se enmarcó en la programación final de la representante de la OIE, que llegó a Chile para participar junto con delegaciones de más de 90 países de la Cuarta Conferencia Mundial sobre Sanidad de Animales Acuáticos.
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Tras realizar un completo recorrido por uno de los centros más exigentes en protocolos sanitarios, la Dra. Eliot, de nacionalidad francesa y especialista veterinaria, dijo estar «gratamente sorprendida» por las políticas de bioseguridad implementadas en la piscicultura «Catripulli» y por el «enorme avance tecnológico» para resguardar la producción de ovas.
«Es muy impresionante. Nunca imaginé este nivel de tecnología en la industria salmonicultora. Cuando eres consumidor piensas que el salmón crece en el agua, pero no, es una industria muy tecnologizada. Mi visita es una oportunidad para tener un ejemplo concreto de lo que significa compatibilizar conceptos en la realidad, y las conversaciones que he tenido son muy interesantes para comprender los desafíos y las dificultades para implementarlas. Deseo que Chile tenga éxito en este proyecto», enfatizó.
En tanto, la timonel del Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura (Sernapesca), Alicia Gallardo, expresó que «los estándares de la OIE son importantes para avanzar en mejores prácticas de bioseguridad y justamente visitamos este centro de AquaChile que es de alto nivel de manejo de enfermedades de peces y esperamos sea un ejemplo para otros centros de acuicultura que requieren mejorar sus sistemas de bioseguridad».
El gerente técnico de AquaChile, Claudio Cumsille, por su parte, comentó que con «mucho agrado» recibieron a las autoridades de sanidad animal. «Nos preparamos con mucho entusiasmo para recibir esta visita en nuestro centro de compartimento de acuicultura de salmón Atlántico (Salmo salar), único en Chile y el mundo. Es un orgullo nacional tener este centro con un nivel sanitario superior. Nuestra piscicultura ‘Catripulli’ es un centro de reproductores en tierra, de agua dulce y ciclo cerrado, es decir, reproductores nacen y mueren acá, por lo tanto controlamos todo el riesgo, somos libres de siete virus», aseguró, añadiendo que el programa genético de tratamiento de ovas les permite «dar gran garantía de su calidad, y nuestra producción es de 65 millones de ovas de salmón Atlántico al año, para abastecer todos los centros acuícola de AquaChile».
Seguridad alimentaria
La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por su sigla en inglés), en su Informe de Estado Mundial de la Pesca y Acuicultura 2018, subraya que el gran desafío del sector es proporcionar alimentos y medios de vida a una población que para mediados del siglo XXI superará con creces los 9.000 millones de habitantes. Y ante la inestabilidad de la producción de pesca extractiva, la acuicultura ha tenido un crecimiento continuo del suministro de pescado para el consumo humano, y Chile se situó en 2018 como el segundo proveedor a nivel mundial de salmónidos de cultivo -después de Noruega-.
