Más de 7.000 controles en carreteras, centros de ventas, puntos de exportación y desembarques, entre otros sectores, realizó durante este año la Unidad Móvil del Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura (Sernapesca) entre las regiones de Coquimbo y Biobío, logrando la incautación de 105.946 kilos (105 toneladas) de pesca ilegal de merluza común avaluada en más de $127 millones.
Christian Quinteros, coordinador de la Unidad Móvil y funcionario de Gestión de Programas de Fiscalización Pesquera del Sernapesca, explicó que las principales infracciones correspondieron a transporte y venta de recurso sin acreditación de origen legal, concentrándose la mayor cantidad incautada -33.886 kilos- en la región Metropolitana, precisamente donde opera uno de los principales centros de venta de productos del mar para la zona centro-norte del país: el Terminal Pesquero Metropolitano (TPM).
De igual manera, las regiones del Maule (25.054 kilos) y Valparaíso (21.485 kilos) se situaron entre las zonas con mayor cantidad de carga ilegal detectada durante los controles de esta unidad fiscalizadora del Sernapesca. Como resultado de estos procedimientos, el servicio público cursó 110 citaciones a tribunales por infracción a la Ley General de Pesca y Acuicultura (LGPA) e incautó 38 vehículos utilizados en el transporte de recursos pesqueros de origen ilegal.
Este Plan Operativo de Fiscalización de la Merluza Común contempla en su diseño el enfoque sobre conductas de riesgo de incumplimiento normativo de los agentes sectoriales, como capturas por agentes no autorizados, en períodos de veda, no reportes o subreportes de carga y la no acreditación de origen legal.
«Este plan tiene como objetivo el contribuir a desincentivar las conductas de riesgo que afectan la sustentabilidad de la merluza común», puntualizan en el Sernapesca, precisando que durante el año 2016 la misma unidad logró incautar 116.849 kilos de merluza común y cursó 103 citaciones.