(MisPeces) El XX Foro de los Recursos Marinos y de la Acuicultura de las Rías Gallegas (XX ForoACUI), que se celebrará los días 10 y 11 de octubre de este año en La Toja, O Grove (España), abordará en una mesa de trabajo sobre «el bienestar animal en acuicultura», un tema de mayor interés en todos los ámbitos.
Entre los ponentes de esta mesa destacan expertos de esta temática como Morris Villarroel, profesor titular del Departamento de Producción Agraria de la Escuela Técnica Superior de Ingeniería Agronómica, Alimentaria y de Biosistemas de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM), con una dilatada y contrastada trayectoria en asuntos relacionados con el bienestar animal y que recientemente ha formado parte de la elaboración de la «Norma UNE 173300 Piscicultura. Guía de prácticas correctas para el sacrificio», referente en esta materia en Europa.
Morris Villarroel abordará de manera específica el «Bienestar en peces: El ayuno antes del sacrificio y la calidad del producto», y repasará la extensa legislación existente en cuanto a bienestar animal en animales vertebrados que se cultivan para comer, en la que se incluirían los peces.
A este respecto, explicó que «la imposibilidad de aplicar muchas de las directrices de la ganadería terrestre a la ‘ganadería acuática’, y la falta de datos científicos referidos al bienestar de los peces, ha llevado a que actualmente en la UE (Unión Europea) se esté trabajando en la elaboración de unos reglamentos específicos con los avales científicos suficientes para estos animales en cada una de sus fases: desde el bienestar en los centros de cultivo, pasando por el transporte o la duración máxima de ayuno previo al sacrificio para la comercialización».
Ya metido en materia de ayuno de los peces, realizará una introducción sobre los aspectos generales de este y porqué es necesario establecer el ayuno antes del sacrificio. Entre otras causas, como indicará el experto, este ayuno tiene mucho que ver con la facilidad en el manejo, con un menor desperdicio de los pellets o con la reducción de la posibilidad de contaminación en la manipulación durante el proceso de despiece.
Dicho esto, la pregunta que planteará será «¿durante cuánto tiempo deben ayunar los peces?», una cuestión que no está legislada, como recuerda Villarroel. En la industria se aplican ayunos que varían entre uno y cinco días, aunque ya hay quienes plantean un límite máximo de 48 a 72 horas, o los tres días que barajan los expertos científicos de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA, por sus siglas en inglés).
Periodos para los que, como destacó Morris Villarroel, «no se ha tenido en cuenta la temperatura del agua en la que se encuentra el pez, ya que no es lo mismo un ayuno de una trucha, por ejemplo, si la temperatura del agua es de 20ºC, que si es de 10ºC, puesto que el nivel metabólico del pez varía de una situación a otra».
Es por esta razón que Villarroel, junto a Fernando Torrent, de la Escuela de Montes y Forestales, y Jesús de la Fuente y su equipo de la Facultad de Veterinaria de la UPM, decidieron trabajar sobre esta idea de incluir grados de temperatura/días de ayuno en el ámbito del bienestar animal, asociándolo también a la calidad del producto final.
Los resultados de los trabajos que han realizado, en este caso en trucha, y que Morris Villarroel expondrá en el XX ForoAcui, han sido publicados recientemente, y en distintos artículos, en una de las revistas de mayor impacto en el ámbito de la acuicultura: «Aquaculture».
En resumen, los investigadores han determinado un ratio de grados/días que consideran el más adecuado desde el punto de vista del bienestar animal y, por ende, de la calidad del producto, y es que, a partir de que se supera ese ratio, se ha comprobado que el pez comienza a resentirse.
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