Habiendo finalizado las movilizaciones y bloqueos de caminos de los pescadores artesanales de Chiloé tras el conflicto social generado por la marea roja, la Asociación de Mitilicultores de Chile (AmiChile), gremio que reúne a las principales compañías productoras y exportadoras así como a medianos y pequeños cultivadores de chorito y empresas de servicios relacionados de la Región de Los Lagos, emitió una declaración pública dirigida a las autoridades, trabajadores de la industria y a la opinión pública en general.
A continuación reproducimos íntegramente el documento firmado por el presidente de la AmiChile, Rodrigo Rosales:
1.- La crisis de la marea roja que afecta a la zona ha dejado como balance una decena de plantas y centros de cultivo paralizados desde hace 21 días y que, hasta el día de hoy, no logran ponerse en marcha para reiniciar la actividad productiva de la industria, fundamentalmente, porque falta todavía que las autoridades de Salud liberen aquellas zonas del mar interior de Chiloé que fueron cerradas preventivamente por la supuesta ausencia de monitoreo de los efectos de la marea roja en dichas áreas de cultivo de choritos y de extracción de otros moluscos.
2.- Debido a esto, un número importante de trabajadores de estas unidades productivas, que estimamos en alrededor de 1.700 personas, ha perdido el empleo, y la industria en su conjunto ha dejado de cosechar un volumen cercano a 30.000 toneladas de materia prima, lo que a su vez significa una menor producción final cercana a las 7.000 toneladas de producto exportable; todo lo anterior equivalente al 10% de la producción anual, valorizado en aproximadamente US$20 millones. Como resultado de esta situación, se han retrasado también faenas de siembra necesarias para asegurar la futura producción y muy posiblemente algunas exportaciones a los mercados internacionales, debido a no haber podido sacar desde las plantas paralizadas los productos terminados que se encontraban listos para embarcar.
3.- Sabemos que el fenómeno de la marea roja y su efecto en la industria mitilicultora aún no ha terminado completamente en Chiloé. Sin embargo, conforme al análisis de la información de resultados de monitoreos de agua y productos realizados en el marco del Programa de Sanidad de Moluscos Bivalvos (PSMB) que nos entrega el equipo encabezado por el biólogo marino y doctor en ciencias y ecología, Dr. Cristian Segura, del Instituto Tecnológico de la Mitilicultura (Intemit), existen importantes áreas en Chiloé central que están libres de la toxina marina y que la industria espera sean abiertas con celeridad por parte de las autoridades acuícolas (Sernapesca) y de Salud (Ministerio de Salud). Producto de esto, se requiere una coordinación eficiente y urgente entre ambas autoridades, la que hasta ahora no se ha visto, que permita la rápida apertura de las áreas libres de toxinas para que los mitilicultores puedan empezar a cosechar y se ponga en marcha la cadena productiva de la industria que permitirá mitigar en parte el efecto de la crisis y reactivar el empleo.
4.- Queremos destacar la importancia que tiene para la industria que nuestras autoridades entiendan los problemas, que con anterioridad incluso a esta crisis hemos planteado en forma reiterada, y que se refieren a la dualidad de atribuciones que estas tienen frente al mismo tema de marea roja. Por una parte, tenemos al Sernapesca (Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura), encargado de llevar el Programa de Sanidad de Moluscos Bivalvos, necesario para garantizar a la Unión Europea, principal destino de las exportaciones chilenas, que se cumplen todas sus exigencias y, por otra, a la autoridad sanitaria que conforme a sus atribuciones, que datan de mucho antes de que se estableciera la actual industria cultivadora y exportadora de choritos, debe velar por entregar seguridad a los consumidores chilenos que no se extraerán mariscos desde áreas contaminadas con la toxina de la marea roja y, para ello, determina el cierre de las áreas de extracción.
Debido a ello, y a que las atribuciones de Salud se sobreponen a las del Sernapesca, se dificultan las actividades de la industria exportadora, por cuanto para salir de la situación de paralización en que nos encontramos, se han agregado condiciones especiales que provienen de Salud y que se suman a los requisitos que el Sernapesca tiene para abrir áreas de cultivo de choritos. Por ejemplo, en el caso actual, se exige el monitoreo de bancos naturales para que Salud decrete la apertura de las áreas, bancos que no tienen ninguna relación con el cultivo que realiza la industria y desde los cuales no se abastecen las plantas industriales.
5.- Todos quienes vivimos en la zona y dependemos de esta actividad estamos interesados, para bien del país y de la región, en reactivar la industria que hoy está paralizada y que da empleo directo e indirecto a cerca de 17.000 trabajadores. Para ello necesitamos actuar en forma más coordinada autoridades y empresas productoras de choritos y encontrar en conjunto soluciones que en el ámbito económico, laboral y sanitario sean favorables para todos y nos permitan superar la crisis en el menor tiempo posible.
6.- Sobre esta materia, queremos llamar la atención de las autoridades y diversos actores relacionados -públicos y privados- vinculados con el desarrollo productivo de nuestra Región de Los Lagos, y en especial del archipiélago de Chiloé, citando las palabras de la Presidenta de la República, Michelle Bachelet, en su discurso del último 21 de mayo ante el Congreso: «Sin crecimiento sostenido el progreso social termina siendo una ilusión» (…) «En el corto plazo nuestro esfuerzo debe estar puesto en generar empleos de calidad, porque el bienestar de las familias está primero. Hagamos un pacto por un crecimiento que se sostenga en el tiempo (…) porque sin complementariedad entre el Estado y el sector privado, sin lazos de confianza entre empresarios, trabajadores y comunidades, todo esfuerzo será en vano».
7.- En consecuencia, queremos remarcar el sentido de urgencia de la situación anteriormente descrita ante las autoridades y la opinión pública en general y por lo tanto hacemos un llamado a actuar en forma rápida, eficiente y coordinada para encontrar las soluciones que la industria mitilicultora demanda. No debemos olvidar que nuestra industria, después de la industria del salmón, es la fuente de trabajo y desarrollo productivo más importante de la isla de Chiloé, y cada día que esta industria continúe paralizada, seguirá afectando a miles de familias que viven de este sector».