El pasado miércoles 3 de mayo, AQUA publicó una entrevista con Alfonso Muena, quien es uno de los precursores de la salmonicultura en Chile, donde sostenía que con la pesca de salmón Chinook se «está creando una oportunidad única desde la región de La Araucanía con el río Toltén, luego a río Bueno y de allí al sur-austral hasta la región de Magallanes (y de la Antártica Chilena)», citando algunos estudios de universidades que están analizando científicamente estos retornos naturales del Chinook asilvestrado.
Tras leer las declaraciones de Muena, el presidente de la Asociación de Guías de Pesca con Mosca y consejero de pesca recreativa de la región de Los Lagos, Paolo Silva, envió una carta a AQUA donde sostiene que «hoy no existen las condiciones, tampoco la confianza en la Subsecretaría de Pesca (y Acuicultura, Subpesca) y menos aún el control y fiscalización del Servicio Nacional de Pesca (y Acuicultura, Sernapesca)».
A continuación reproducimos íntegramente la misiva:
La pesca recreativa es una actividad de turismo específico, la cual ha estado creciendo a medida de llegar a transformarse en una pequeña industria con un alto aporte económico a nivel del turismo local y regional.
Hemos de considerar que hace años la pesca de truchas fue por lejos de gran importancia en aguas de la región de Los Lagos y en especial en las comunas de Puerto Varas y Cochamó, teniendo por otro lado una alta competencia por captar pescadores con otras regiones como la de Aysén y en especial con otros países como Nueva Zelanda, Estados Unidos y Argentina, nuestro competidor más próximo y el cual supera enormemente el nivel de visitantes comparado con nuestro país.
Hoy en día contamos con un actor relativamente nuevo en nuestras aguas, el salmón Chinook, el cual ha incrementado significativamente la visita de pescadores nacionales e internacionales a nuestra región debido a su alto valor deportivo, entre cuyos países de origen se encuentran Estados Unidos, Brasil, España y Argentina.
El aporte socioeconómico de la actividad turística de pesca recreativa y por consiguiente directamente relacionado con el aporte del recurso salmón Chinook, hoy en día para las comunas de Chochamó y Puerto Varas arrojan cifras superiores a los US$3 millones para cada una y cuyo potencial proyectaría tan solo para la comuna de Puerto Varas cifras que van por sobre los US$10 millones.
A nivel mundial, dicha especie se encuentra pasando por momentos difíciles debido a la importante reducción de su población. Estados Unidos, lugar desde provenieron los salmones cuyos descendientes son con los que contamos, ha llegado al punto de prohibir su captura y cerrar ríos y desembocaduras para cualquier tipo de captura, ya sea comercial (artesanal) e incluso recreativa, sin importar si esta pudiese ser considerada con pesca y devolución, debido a que la cantidad de salmones que retornan no son suficientes para asegurar la continuidad de la especie.
Parte importante de ello se debe a represas que dificultan el desove y a la pesca comercial, actividades reglamentadas. Estamos hablando de un país en donde hay conciencia del peligro que corre la especie, donde el control y la fiscalización funcionan, donde la política para normar es transparente, debido al estricto rigor con el que se exige que se cumplan las leyes. Pese a esto, el poco éxito de los retornos es un problema latente.
Es aquí en donde el potencial con el que contamos hoy como país puede jugar un gran papel para aumentar la economía a nivel de región, debido a que pescadores viajan a otros países del mundo en busca de este preciado trofeo. En este caso, al nuestro.
La gran amenaza, intereses privados por la actividad comercial
Desde hace un tiempo existe el interés por parte de privados y el apoyo de autoridades para realizar una pesquería del salmón Chinook. El más próximo a llevarse a cabo se dio en el año 2013, cuando la Subsecretaría de Pesca, mediante la resolución exenta N°686 del 2013, autorizó a la Consultora Pupelde a realizar una supuesta pesca de investigación del salmón Chinook, bajo el financiamiento privado de Comercial Nahuelbuta S.A.
Dicho proyecto que se presentaba como «Evaluación de remontes del salmón Chinook en las cuencas de los ríos Toltén, río Bueno, Puelo y Yelcho», el cual indicaba como objetivo determinar poblaciones, distribución, abundancia, condiciones físicas, áreas y épocas de desove, recopilar y analizar programas y planes de manejo para remontes de esta especie aplicados a ríos del hemisferio norte, entre otros.
Se autorizaba la captura y retención de 7.000 individuos en total, según «Terminos Técnicos de Referencia» mediante una colecta directa de especies, permitiéndose aparejos de pesca comercial a escala menor, apuntando a especies en etapa de pre-desove (situación óptima para proceso del producto) capturados en zonas estuarinas y marítimas.
Se indica que dicha pesca de investigación no tiene fines comerciales, sin embargo se autoriza a Consultora Pupelde disponer de las capturas obtenidas, incluyendo el procesamiento de las mismas. El procesamiento de ellas se realizaría en la planta perteneciente a Comercial Nahuelbuta Ltda.
Lo anterior puso en alerta al sector turístico económico de las comunas de Puerto Varas y Puelo, el cual se organizó para detener la supuesta pesca de investigación, que a todas luces correspondía a una excusa para el procesamiento y comercialización del salmón Chinook. Debido a las presiones del sector, Comercial Nahuelbuta decide no financiar el proyecto, lo que se indica mediante resolución exenta N°1589 de agosto del 2013 de la Subsecretaría de Pesca, que deja sin efecto las resoluciones que autorizaron la pesca de investigación.
De ahí a la fecha se ha planteado por parte de las autoridades al sector turístico de pesca recreativa fomentar una pesca de investigación para el uso del recurso para la pesca comercial, antes de que los salmones ingresen a los ríos, quienes insisten que un periodo de estudio de uno a dos años es suficiente.
La postura del sector es clara, para un estudio completo que permita entre otros conocer y entender acerca de las poblaciones retornantes de salmón Chinook, así también las capacidades de carga de los ríos y las cantidades necesarias para sustentar la especie en el tiempo, sin necesidad de repoblamiento, lo cual llevaría a un desastre y en definitica a un sacrificio de la actividad de pesca recreativa en supuesto favor de la pesca comercial. Se indica que no debería de ser inferior a los siete años, en cada río, postura que ha quedado clara en diferentes reuniones en que se presenta el tema salmón Chinook entre funcionarios de la Subpesca.
Hoy el discurso es diferente, se destaca que cualquier iniciativa es en directo beneficio de la pesca recreativa, proponiendo incluso la producción de salmón Chinook mediante la siembra en los ríos, lo cual atenta con la actividad turístico económica y la biodiversidad de especies en los cuerpos de agua. Se presenta de forma diferente para el mismo fin, llevar a cabo una pesquería del recurso con fines comerciales.
Todo lo anterior en torno a este tema lo conoce muy bien el actual director zonal de Pesca y Acuicultura, Juan Gutierrez P., ex Pupelde, quien formaba parte del proyecto como director alterno.
Irregularidades en el Consejo de Pesca Recreativa
El pasado 10 de noviembre, citación preparada para un día antes de la apertura de temporada para la cuenca del lago Todos Los Santos y el río Petrohué, se llevó a cabo el 14° «Consejo de Pesca Recreativa» que regularía las normativas para dichos cuerpos de agua.
El tema del salmón Chinook nuevamente se puso sobre la mesa, llegando al punto de cometer por parte de la Subsecretaría irregularidades que van por sobre las normativas y las leyes que conforman el consejo.
Según la Ley de Pesca 20.256, el Consejo debe ser presidido por el director zonal de Pesca y Acuicultura, sin embargo al momento de iniciarse el punto de normativas para el río Petrohué, se excusa y retira del Consejo dejando a cargo y presidiendo el «Consejo Regional de Pesca Recreativa» a un funcionario del Servicio, por lo cual no se pudo haber conformado el Consejo.
En representacion de los directores de Servicios asistieron funcionarios públicos, a pesar de que por resolución exenta N°01 del 2008, solo pueden ser reemplazados por quienes los subroguen legalmente. Esto deja fuera a los representantes que asistieron, a pesar de esto por parte de la Subpesca se les permitió votar. Cumplieron con la asistencia el representante de los guías de pesca y la representante de las universidades.
La propuesta del director zonal, según minuta del funcionario de la Subpesca, fue la de permitir en el río Petrohué la captura y retención de tres ejemplares de salmón Chinook (más de 45 kilos) por pescador, por día de pesca. Según queda como evidencia en acta N°14 02/2016, la cual indica que dicha medida es más restrictiva que el decreto supremo N°320 que reglamenta las actividades de pesca recreativa, a la cual el Consejo siempre había sido más restrictiva en pro del fomento de la actividad turístico económica y de la protección y sustentabilidad de las especies.
Sin embargo, el decreto supremo N°320 artículo 6 indica el máximo de kilógramos permitidos para retener en 15 kilos. Con una cantidad superior a un salmón Chinook se sobrepasa lo indicado, por lo cual la propuesta no es más restrictiva, lo indicado en el acta se contradice.
A pesar del rechazo manifestado con votación negativa por el consejero representante de los guías de pesca a la propuesta, señalando que se promueve una pesca comercial, fomenta la pesca ilegal de salmonídeos, que dichas medidas tendrán un impacto negativo en la actividad turístico económica de la pesca recreativa, además de generar un impacto ambiental en los tributarios del río Petrohué, se llega a acuerdo por parte de los demás integrantes a la reunión mediante mayoría de votos en autorizar la captura y retención de dos salmones (más de 30 kilos) por pescador por jornada de pesca. Recordemos que integraron el Consejo funcionarios públicos que no tienen derecho a voto; el voto del representante de los guías de pesca fue en rechazo.
A pesar de las cartas emitidas al director zonal indicando las faltas en el Consejo y solicitando se realice un nuevo proceso de forma transparente, este autoriza y firma la resolución exenta N°03 del 2016 de la Dirección Zonal de Pesca, que señala que el Consejo de Pesca Recreativa ha aprobado por mayoría de sus miembros las medidas propuestas.
La constante amenaza
La pesca ilegal de las especies salmonídeas en los ríos, sus tributarios y el estuario están ocasionando un grave daño, lo cual amenaza con hacer desaparecer la sustentabilidad del recurso y a la actividad turístico económica.
La falta de fiscalización que existe hoy en día, da la libertad a pescadores furtivos para ejercer su actividad y el incentivo al comercio ilegal debido a la permisibilidad por falta de control, son problemas que existen y que están documentados en publicaciones de diarios a nivel local y regional.
Es función del director nacional del Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura adoptar las medidas para la aplicación, cumplimiento y fiscalización de las leyes, reglamentos y normas sobre pesca, según decreto con fuerza de ley N°01 del 06 de enero del 2014, quien no cumpliría con dicha función en temas de pesca recreativa en nuestra región, por lo cual estaría cometiendo un «notable abandono de deberes».
El río Petrohué de hoy
Luego de la erupción del volcán Calbuco, el río Petrohué se ha visto seriamente afectado, así también sus zonas de desoves, algunas de las cuales quedaron sepultadas bajo sedimentos.
Las condiciones geografícas del río han variado notablemente, el sedimento de las fuertes lluvias de este año ha cubierto por completo el fondo, poniendo en peligro la vida de insectos, crustáceos, alimentos para las especies silvestres y nativas que al contrario de lo que se indica, existe en buenas condiciones. Los desoves de salmones no se están realizando con éxito, debido a la escasa cantidad de peces que llegaron a cumplir este ciclo, lo que afecta a las truchas, quienes no se pueden alimentar de las ovas de salmón, las cuales generan un aporte nutricional importante para su supervivencia durante los meses de invierno, época en que ellas desovan. Hoy los conteos de nativos y truchas se realizan con éxito, pero hemos de esperar para ver el real impacto generado por el volcán Calbuco en los cursos del río Petrohué y sus tributarios.
Es todo un ciclo el que hoy se ve amarrado al salmón Chinook. Cualquier iniciativa que se realice en cuanto a cuotas, en el río o en el estuario, como así la pesca ilegal afecta directamente al río Petrohué, el cual debe mantenerse hoy como un río exclusivamente de pesca y devolución.
El futuro del recurso
Nuestra postura ante la posibilidad de una futura utilización del recurso salmón Chinook para los actores de la pesca recreativa y la pesca artesanal: hay que crear las condiciones, se tienen que generar las confianzas y realizar los estudios por cada río, por presentar estos una conducta diferente, por una cantidad suficiente de años que permitan establecer con claridad y transparencia, entre otros, las necesidades para la sustentabilidad de la especie y la biodiversidad, sin necesidad de repoblamiento o siembra, además de contar con las medidas de control a las que se obliga el Servicio Nacional de Pesca.
Hoy no existen las condiciones, tampoco la confianza en la Subsecretaría de Pesca y menos aún el control y fiscalización del Servicio Nacional de Pesca.
Un estudio de este tipo, bien hecho, requiere de recursos, tiempo y paciencia, y eso es algo que políticamente no es viable debido a lo corto de los periodos de Gobierno. Ninguno quiere trabajar en pro de una actividad ni trabajar para el Gobierno que siga, sino que es mejor implementar políticas rápidas, mal hechas, y como quedó claro con el último Consejo de Pesca Recreativa, no importa pasar por sobre la ley.