En el contexto de la reactivación de la salmonicultura y la consolidación de la industria acuícola, se desarrollará la décima versión de la Feria Internacional AquaSur, que este año tendrá su foco en la innovación tecnológica de soluciones.
En ese contexto, Indura estará presentando avances que van desde el crecimiento y mantención de los peces, hasta su procesamiento en la industria alimentaria.
Con su reciente expansión a la región de Aysén, Indura y su área acuícola llegaron a cinco nuevos centros de mar. Con lo anterior, ya opera en 17 centros, a los que provee soluciones y tecnología de primera categoría. Fernando Sáenz-Laguna, subgerente de Negocio Acuícola de la compañía, comentó que luego de resolver el desafío logístico de llegar a Aysén, «ahora contamos con todo lo necesario para entregar un servicio acorde a las necesidades de los actores de este mercado en la zona, pues tuvimos que expandir la distribución a una embarcación de mayor capacidad de transporte y navegación».
En relación a la solución, se trata de oxígeno líquido, LOX, el que proporcionan a los centros de engorda de salmones en agua de mar, «puesto que según ciertas condiciones ambientales y de cultivo, existe la necesidad en la industria de asegurar niveles adecuados de oxígeno disuelto en agua para una conversión del alimento óptima», afirma el ejecutivo.
Congelación criogénica
En esta ocasión, la compañía de gases también estará presentando soluciones para la conservación de productos del mar. En este caso, la industria ha generado técnicas para reducir la velocidad del crecimiento de microorganismos y disminuir la actividad enzimática y reacciones químicas, mediante soluciones a bajas temperaturas.
Una de ellas es la congelación criogénica para procesar productos del mar desarrollada por Indura y cuya técnica se basa en el uso de nitrógeno líquido para lograr una óptima conservación.
Según explica el subgerente de negocios del área Alimentos de la empresa, Roberto Contreras, «los alimentos provenientes del mar se congelan en un rango de temperatura entre -2ºC y -4ºC, luego de ello se llevan a temperatura de almacenamiento bajo los -18°C. En el transcurso en que logran estas bajas temperaturas se forman microcristales de agua en su interior; por lo tanto, la calidad del producto congelado será mejor cuanto más rápido se llegue a esta condición, manteniendo sus características cuando sea descongelado».
Así, dentro de las grandes ventajas que tiene el uso de la congelación criogénica, cuentan que «los productos no pierden su calidad y características de vital importancia como el sabor, textura, color y olor. Además, este método cumple con los altos estándares de exigencia que demanda la industria alimenticia», agrega el ejecutivo, precisando que «también proporciona beneficios operativos, ya que se requiere una menor inversión inicial, posibilita una mayor flexibilidad en la capacidad de producción, necesita menor cantidad de energía eléctrica, no requiere de grandes espacios y permite una fácil limpieza de los equipos».