Este martes 21 de noviembre, se realizó en el Hotel Presidente de Puerto Montt (región de Los Lagos) un taller donde se buscaba obtener opiniones para definir la visión estratégica de una futura Política Nacional de Acuicultura para Chile.
El encuentro fue convocado por la Escuela de Ciencias del Mar de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso (PUCV) en asociación con COPAS Sur Austral y el Centro Interdisciplinario para la Investigación Acuícola (INCAR), entidades que están trabajando en el proyecto financiado por el Fondo de Investigación Pesquera y de Acuicultura (FIPA) denominado «Propuesta de Política Nacional de Acuicultura (PNA) para las siguientes dos décadas».
En la instancia participaron representantes de organismos públicos vinculados con la actividad, como Subsecretaría de Pesca y Acuicultura (Subpesca), Superintendencia del Medio Ambiente (SMA) y Corporación de Fomento de la Producción (Corfo), además de representantes del mundo mitilicultor, salmonicutor y de la acuicultura de pequeña escala (APE).
Según lo informado, el grupo de investigación tiene por misión realizar una actualización a la PNA, vigente desde 2003, con el fin de darle una mirada hacia el futuro y adaptada a las actuales condiciones y desafíos del sector. Para esto, se han efectuado talleres en distintas regiones, con el fin de definir en conjunto con los principales actores la visión del sector para los próximos años. Luego, se realizará la formulación a la política y finalmente la implementación.
Ricardo Norambuena, investigador del Centro COPAS Sur Austral y quien condujo el taller, explicó que la actual PNA identificó seis ámbitos de acción, entre los que se cuentan el crecimiento de la actividad, sustentabilidad ambiental, protección del patrimonio sanitario, equidad en el acceso, institucionalidad y marco jurídico e investigación. Añadió que en estos años la industria ha mostrado un constante crecimiento, sobre todo la salmonicultura y mitilicultura. Sin embargo, se preguntó «¿qué pasa con el desarrollo?», haciendo alusión a la forma cómo se ha efectuado ese crecimiento.
Es por eso que en esta nueva política se espera abordar los temas que están siendo relevantes hoy para la industria, como el aumento de los riesgos productivos ambientales, incremento de los costos de producción, tecnologización y sofisticación de los servicios requeridos, descentralización e inclusión social y cambio climático.
También se espera analizar problemas y «deudas pendientes» en términos de la incertidumbre que persiste respecto de la capacidad de carga, sobre todo en la salmonicultura, así como la débil capacidad de promover el consumo interno y de desarrollar productos nuevos en la mitilicultura. De igual forma, se buscar apoyar a ostioneros y abaloneros para que sus actividades cobren mayor impulso y observar el potencial de la diversificación acuícola.
De acuerdo con lo descrito, la nueva PNA tendrá una mirada a futuro en base a un desarrollo sustentable y bajo un enfoque ecosistémico y precautorio. El objetivo es que el crecimiento económico vaya acompañado de sustentabilidad ambiental y equidad en lo social, principalmente, en el acceso a la actividad.
Se espera que el informe final de este proyecto se entregue en marzo de 2018.