«La acuicultura es la fuente de proteína animal con menor huella de carbono y esto nos evidencia que jugará un papel clave en la transformación de nuestro sistema alimentario», manifestó este lunes 12 de junio el director ejecutivo (CEO, por sus siglas en inglés) de Cermaq, Geir Molvik, durante el panel «La comida puede solucionarlo» del Foro EAT 2017.
Cermaq es socio de EAT y ha integrado los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas (SDGs) en su estrategia. La compañía también se asocia a organizaciones de diversa índole reconociendo que se pueden lograr más cosas si se trabaja en conjunto.
Es así como las alianzas de Cermaq abarcan tres dimensiones: 1) la industria de la salmonicultura, incluyendo clientes y proveedores; 2) la industria pesquera que incluye la captura de los ingredientes marinos -fundamentalmente harina y aceite de pescado-; y 3) los distintos actores del sector alimentario que participan de alguna manera en el cultivo de especies hidrobiológicas.
«Es una gran oportunidad de mercado para todos los productos del mar, lo que es muy alentador. Pero para esto debemos hacer las cosas bien, hacer que nuestros negocios tengan éxito y a la vez tomar las acciones necesarias para lograr los SDGs», enfatizó Molvik, para quien todos seremos «impactados pesadamente» si no alcanzamos los SDGs. Sin ir más lejos, la acuicultura ya se ha visto afectada directamente por los efectos del cambio climático. Uno de estos: el aumento de la temperatura del mar que altera a los peces y las aguas en que viven.
«Como líderes de la industria alimentaria debemos mirar hacia adelante para encontrar las soluciones que nos permitan obtener comida suficiente de una manera sustentable. Y claramente en este sentido hay oportunidades de negocios también», reconoció el representante de la salmonicultora que es controlada por la japonesa Mitsubishi Corporation pero cuya casa matriz permanece en Noruega. De igual forma, tiene operaciones de cultivo en Canadá y Chile.