[EN-ES] Nuevo estudio: Comparan la eficiencia de la acuicultura con la agricultura

Jun 20, 2018

Los científicos del NCEAS compararon las necesidades actuales de uso de tierras para la producción de carne con un potencial futuro en el que la acuicultura proporciona la proteína adicional que la población necesitará para 2050.

ENGLISH (EN)

New study: Comparing the efficiency of aquaculture with agriculture

Aquaculture is the future of food, this was the conclusion of the study by the National Center for Ecological Analysis and Synthesis (NCEAS) of the United States and published in the National Academy of Sciences. Centered on the implications of land use and traditional production of meat, the research discovered that carefully planned aquaculture satisfies the protein demand of the growing world population without causing additional harm to the earth, water, or other natural resources. Furthermore, the aquaculture industry can play an important role in reducing the footprint necessary to produce food.

According to the Food and Agriculture Organization (FAO) of the United Nations the world will need to more than double production of food over current levels by 2050 to satisfy the protein demand of the world’s population, which is on track to reach 10,000 billion. There is no longer new cultivable land left on the planet and land erosion, contamination, and other factors have reduced the cultivable area by a third in the last 40 years.

The feed conversion rations (FCR) of beef is the most inefficient form of protein production humans currently produce. In comparison, the FCR of aquaculture protein is significantly lower because fish are able to allocate much more energy into edible product.

ESPAÑOL (ES)

La acuicultura es el futuro de los alimentos. Al menos, esa fue la conclusión de un estudio realizado por el Centro Nacional para Análisis y Síntesis Ecológicas de Estados Unidos (NCEAS, por su sigla en inglés) y publicado en Proceedings of the National Academy of Sciences of the United States of America. Centrado en las implicancias del uso de la tierra y la producción tradicional de carne, la investigación descubrió que la acuicultura puede, si se planifica e implementa cuidadosamente, satisfacer las demandas de proteínas relacionadas con la creciente población mundial sin causar tensión adicional en la tierra, el agua u otros recursos naturales.

De hecho, la industria acuícola puede desempeñar un papel importante en la reducción de la huella necesaria para producir alimentos en el futuro, creando un sistema alimentario más sustentable para todos.

¿Quién sabe?

«Nos motivaron las grandes consideraciones y desafíos globales de la creciente población humana y nuestra dependencia de la tierra para producir ese alimento», explica la autora principal Halley Froehlich, investigadora postdoctoral en el NCEAS, que es parte de la Universidad de California – Santa Bárbara (UCSB), añadiendo que existe una cantidad finita de ese recurso. Entonces, ¿qué significa eso para la sustentabilidad y los objetivos de conservación más grandes?

Los científicos del NCEAS compararon las necesidades actuales de uso de tierras para la producción de carne con un potencial futuro en el que la acuicultura proporciona la proteína adicional que la población necesitará para 2050. Descubrieron que la adopción a gran escala del cultivo de especies hidrobiológicas podría ahorrar tanto como 1.800 millones de acres (728 millones de hectáreas) de tierra en todo el mundo, un área equivalente al doble de la India, liberando esa tierra para la agricultura y otros usos productivos.

Y ni siquiera tendríamos que sacrificar la carne por completo para llegar allí.

«Para la producción alimentaria existe una amplia gama de futuros plausibles, entonces, ¿cómo podemos satisfacer nuestras necesidades desde una perspectiva terrestre? Puede aumentar la eficiencia de la tierra de los cultivos que está produciendo; puedes aumentar el riego; puede aumentar las eficiencias de los animales terrestres, pero nadie había pensado en un sentido más amplio cómo la acuicultura se ajusta a esa cartera de soluciones. De ninguna manera es esta la única posibilidad o una solución mágica para resolver lo que está por venir para nuestras demandas de consumo, pero definitivamente es parte de la discusión que deberíamos tener y que realmente no se ha tenido hasta este momento», enfatiza la experta de la UCSB.

Un planeta cambiante

El momento de comenzar a hablar de esto es ahora, argumentan Froehlich y otros, porque los humanos pueden quedarse sin comida o su capacidad para producirla.

Según la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO, por su sigla en inglés), se necesitará más que duplicar la producción desde los niveles actuales para 2050 con el fin de satisfacer la demanda de proteína de la creciente población mundial, que está en camino de llegar a los 10.000 millones en ese momento, junto con la mejor calidad de vida de esa población. Pero el planeta se está quedando sin tierra cultivable, que ha disminuido aproximadamente un tercio en los últimos 40 años debido a la erosión, la contaminación y otros factores.

Si bien existe cierto debate sobre estas cifras –tienden a variar desde un aumento del 20 al 100% en la producción de alimentos en los próximos 30 años– el hecho es que los patrones actuales de producción de alimentos centrados en la agricultura terrestre a gran escala y la ganadería son insostenibles.

El problema es doble: el ganado, en particular, necesita espacio. Es que se requiere cerca de una hectárea de tierra para alimentar a una vaca con pasto durante un año. Y las vacas son productoras ineficientes de proteína, ingieren más de seis libras de alimento y ocho galones de agua por cada libra de carne que producen*, una cifra conocida como índice de conversión alimenticia (FCR). El pollo y los cerdos son un poco mejores, a 2 y 3,5 por libra de producto terminado, respectivamente. Los FCR están relacionados con el uso de la tierra porque un tercio de la tierra cultivable del planeta se utiliza actualmente para producir cultivos para la alimentación del ganado, una cantidad que se espera que aumente a medida que se incrementa la demanda.

La ventaja de la acuicultura

Tim Sprinkle (cuyos trabajos han aparecido, entre otros medios, en Wired, Outside y autor del libro «Screw the Valley: A Coast-to-Coast Tour of America’s New Tech Startup Culture») publicó un artículo citado por la Alianza Global de la Acuicultura (GAA, por su sigla en ingés) en donde se afirma que los peces de cultivo son una fuente de proteína animal mucho más eficiente, con un FCR de solo 1,15 para un salmón Atlántico, 1,5 para un barramundi australiano, 1,1 para la tilapia y así sucesivamente. Además, aunque la acuicultura ejerce presión sobre ciertos cultivos en tierra para la producción de algunos ingredientes de alimentos, como la harina de soya y los aditivos a base de soya, la necesidad relativa de la industria para ellos es mucho menor que para la producción terrestre.

«Realmente se trata de que los organismos son lo que se llama poiquilotermos, por lo que realmente dependen de la temperatura que los rodea para determinar qué tan eficientes son. No tienen que trabajar mucho para mantenerse calientes porque dependerán de su entorno, en comparación con los animales en tierra, que tienen que regular su propia temperatura porque son aves o mamíferos», precisa Froehlich.

Los peces también viven bajo el agua y, como resultado, son muy eficientes para convertir los alimentos en biomasa, en comparación con los animales que viven en la tierra.

«Los animales terrestres tienen que luchar contra la gravedad, por lo que tienen huesos gruesos y músculos más fuertes», explica el coautor del estudio, el Dr. Ben Halpern, director de NCEAS y profesor de la Escuela Bren de Ciencias Ambientales y Gestión de la UCSB. «Esa es una gran cantidad de biomasa necesaria para pararse y caminar, y es algo que no se puede comer. Entonces se está poniendo mucha energía en cultivar una infraestructura del animal. Mientras que en el océano no tienes que hacer nada de eso, los peces ponen mucha más energía de los alimentos en cosas que luego podemos comer», destaca el Dr. Halpern.

La biodiversidad de la acuicultura es otra ventaja para la industria, ya que las especies como los bivalvos -entre estos el mejillón o chorito- no requieren necesariamente ningún tipo de alimentación directa, lo que reduce aún más su huella de uso de la tierra. El estudio NCEAS asumió una contribución del 25% de los moluscos en sus cifras.

Mirando hacia el futuro

Los investigadores no emitieron ninguna orientación específica como parte de su trabajo, ni consideraron las implicaciones del uso de la tierra de las instalaciones acuícolas en sí mismas, pero su esperanza es que sus hallazgos inspiren a otros a tomar medidas.

«Realmente no sabemos lo que la gente querrá comer en 2050 o exactamente cuántas personas habrá en el planeta, pero sabemos que habrá mucha más gente y sabemos que van a querer más proteína en general», subraya el académico de la UCSB.

Su idea no era tratar de predecir cómo sería el futuro, sino señalar que existen algunas implicancias significativas en el uso de la tierra para un futuro en el que las personas continúan comiendo mucha carne de cerdo y pollo, contra un futuro donde las personas comen más pescados y mariscos de cultivo, incluyendo las algas.

«El poner más énfasis en el crecimiento y la producción en torno a la acuicultura realmente puede ayudar a aliviar algunas de las presiones futuras sobre el uso de la tierra y la conservación de esta», concluye el Dr. Halpern.

*1 libra es igual a 0.45 kilógramos

1 galón es igual a 3.78 litros

Lo último
Te recomendamos

REVISTA DIGITAL

[latest_journal_single_iframe]
Temas relacionados
academia acuicultura acuicultura sustentable aditivos agricultura agua aguas algas Alianza Global de la Acuicultura Alianza Global por la Acuicultura alimentos animales animales marinos animales poiquilotermos acuáticos animales terrestres barramundi Ben Halpern Biodiversidad biomasa bivalvos bovinos California carne carnes carnes rojas Centro Nacional para Análisis y Síntesis Ecológicas Centro Nacional para Análisis y Síntesis Ecológicas de Estados Unidos cerdo ciencia ciencias comida contaminación cultivo de especies hidrobiológicas cultivo de peces cultivo de salmón Dr. Ben Halpern ecología erosión especies hidrobiológicas Estados Unidos estudio factor de conversión Factor de Conversión Alimenticia factor de conversión biológico factor de conversión de alimento factor de conversión de alimento biológico factor de conversión del alimento Factor de Conversión Económico FAO FCR FCRb FCRe GAA ganadería ganado Halley Froehlich harina de soja harina de soya huella huella de carbono huella ecológica humanos India industria acuícola industria acuicultora insumos insumos vegetales Investigación investigadora mar mariscos mejillón Mejillones mitilicultura mitílidos moluscos moluscos bivalvos Naciones Unidas NCEAS océano océanos Organización de las Naciones Unidas Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura peces peces de cultivo planeta planeta Tierra población población mundial poiquilotermos pollo proteína proteínas recursos hidrobiológicos recursos naturales riego Salmón salmón de cultivo salmonicultura Santa Bárbara seguridad alimentaria ser humano seres humanos sistema alimentario soja soya Sustentabilidad sustentabilidad acuícola Tierra tierras tilapia UCSB Universidad de California Universidad de California – Santa Bárbara vacas vacuno vacunos