El ex secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), durante los años 2007 y 2016, Ban Ki-moon, no es experto en acuicultura. La razón por la que fue invitado como el expositor principal del primer día de AquaVision, conferencia internacional que se realiza en Stavanger (Noruega) y que finaliza hoy miércoles 13 de junio, se debe a su conocimiento transversal de los principales problemas que enfrenta el mundo y que, por lo mismo, terminan afectando o impactarán a todas las personas, empresas y gobiernos.
Y su análisis no pudo ser más desafiante. El cambio climático está ocurriendo hoy, el aumento en el nivel del mar (producto de los deshielos) está dejando bajo el agua a varias zonas del planeta y, si no se hace algo, «en diez años más el nivel de los océanos subirá 90 centímetros, afectando a gran parte de las comunidades costeras del planeta», puntualizó el diplomático surcoreano que actualmente posee una oficina en Vietnam y desde donde motiva a los líderes del planeta a realizar más ayuda humanitaria.
Pero lo peor del análisis es que, al no tener la humanidad otro planeta, «no tenemos un plan B y probablemente en el futuro el tema empeorará», puntualizó el líder ante una audiencia de 450 ejecutivos de la industria acuícola global y quien criticó al Gobierno de Donald Trump por retirarse del Tratado de París, «ya que, de no revertir su decisión, traerá serias consecuencias para el planeta».
Acuicultura afectada
En este escenario, la humanidad y la acuicultura no solo se verán afectadas por un crecimiento en el nivel del mar. También está el tema de la contaminación de las aguas. «En 2050, habrá más plásticos que peces en los mares«, expresó Ban Ki-moon, recordando que esto dificultará a la creciente actividad cultivadora de recursos hidrobiológicos de cumplir con su promesa de alimentar al planeta.
Sin embargo, la esperanza no está del todo perdida. En septiembre de 2015, precisamente bajo la dirección del surcoreano, la ONU lanzó sus 17 Objetivos para un Desarrollo Sostenible (ODS) y que, de implementarse por empresas o naciones, permitirá revertir paulatinamente la situación del cambio climático o, incluso, «no permitirán que nadie en el planeta tenga hambre».
«Por ello llamo a todos ustedes, que son líderes en sus comunas o áreas, para que implementen estas metas», se despidió el líder con un caluroso aplauso de los asistentes al evento organizado por Skretting y el cual está siendo reporteado in situ por AQUA.
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