A un paso de ser despachado por el Congreso quedó el proyecto de modernización del Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura (Sernapesca). Esto, luego que en la última sesión de la comisión mixta encargada de resolver las discrepancias surgidas en torno a la iniciativa, se informó que solo resta desarrollar una jornada más de trabajo, antes de la remisión del articulado a las salas de la Cámara y del Senado, para su visto bueno final.
El Ejecutivo ha impulsado la propuesta, pues constituye un engranaje clave dentro de la estrategia definida para combatir la pesca ilegal.
Durante la semana pasada, en un seminario de Oceana, el subsecretario de Pesca y Acuicultura, Eduardo Riquelme, sostuvo que ese fenómeno es un «formidable enemigo» que debe ser enfrentado con decisión y de manera mancomunada.
El proyecto de modernización del Sernapesca configura delitos en materia de pesca ilegal y establece sanciones, bajo la premisa de que es necesario enfocarse en toda la cadena criminal y no solo en el eslabón más débil, por lo general el pescador artesanal.
La iniciativa que está terminando de examinar la comisión mixta dispone, además, una serie de medidas encaminadas a perfeccionar el desempeño del Servicio, dirigido actualmente por Alicia Gallardo.
Uno de esos puntos se relaciona con la incorporación de 253 nuevos funcionarios. Doscientos treinta y tres de ellos se dedicarán a la certificación de desembarques, mientras que los otros 20 inspeccionarán plantas de proceso para velar por la inocuidad de los recursos marinos que allí se manipulan.
El proyecto avanzó durante las últimas sesiones, a partir del diálogo permanente que se dio entre el subsecretario Riquelme y los congresistas que forman parte de la comisión mixta.
El grupo de trabajo lo preside el senador Rabindranath Quinteros, quien, a la vez, encabeza la Comisión de Intereses Marítimos, Pesca y Acuicultura de la Cámara Alta.