Los argumentos de los senadores en el debate por la jibia

Con las tribunas llenas de trabajadores de la pesca artesanal, se desarrolló durante la tarde de este martes 9 de octubre el debate que sometió a votación en general la moción, en segundo trámite constitucional, que modifica la Ley General de Pesca y Acuicultura (LGPA) con el objetivo de regular la captura de la jibia, lo que finalmente fue respaldado por 27 votos a favor, 2 en contra y 2 abstenciones.

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A juicio de los congresistas detractores, la propuesta tiene sesgos de inconstitucionalidad, por lo que no descartaron acudir al Tribunal Constitucional.

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Potera y línea de mano

En definitiva, el texto legal regula la extracción del recurso jibia (Dosidicus gigas) permitiendo para esto solo la utilización de un aparejo denominado potera (formado por una pieza de plomo cuya parte inferior está constituida por un número considerable de anzuelos, sin puntas de flechas) y el arte de línea de mano y propone una sanción con multa de 500 UTM ($24.000.000 aproximadamente) y el comiso de las especies hidrobiológicas y de los productos derivados de estas, a los armadores que infrinjan la norma.

Durante el debate -donde se acordó fijar como plazo de indicaciones el lunes 29 de octubre- manifestaron sus posturas los senadores Rabindranath Quinteros, Iván Moreira, Ximena Rincón, Ricardo Lagos Weber, Adriana Muñoz, Francisco Chahuán, Alejandro Guillier, Kenneth Pugh, Isabel Allende, Juan Ignacio Latorre, Luz Ebensperger, Alejandro Navarro, Álvaro Elizalde y Rafael Prohens.

El proyecto se fundamenta en que en los últimos años la pesquería de la jibia ha venido a reemplazar otras que se encuentran en crisis, afectando especialmente a los pescadores artesanales que, según el registro respectivo, involucrarían a un universo de alrededor de 500.000 personas, considerando empleos directos e indirectos.

A continuación detallamos los extractos de la intervención de los legisladores que fueron destacados por la Cámara Alta:

Fin a la captura de arrastre

Quinteros: «Por la supuesta inconstitucionalidad, la Comisión (de Pesca, Acuicultura e Intereses Marítimos) siguió el criterio de la secretaría de la Comisión; además, el año 2003 se aprobó una moción sobre pesca de arrastre (…), es plenamente procedente que el Congreso regule. En cuento al fondo, voto a favor porque estoy convencido del efecto nocivo de la pesca de arrastre; por otra parte, la pesca con potera está generalizada a nivel internacional. (…) No está en riesgo el abastecimiento de las plantas. (…) Este recurso es una alternativa para la crisis que han debido enfrentar los pescadores artesanales».

Moreira: «Fui 20 años diputado de la región Metropolitana y de pesca no sabía nada, asumo mi responsabilidad que en aquella época voté la Ley de Pesca que ha sido cuestionada y no soy partidario de anularla (…) Pero en lo concreto, lo primero que hay que resolver es la constitucionalidad de este proyecto. El gobierno anterior solicitó que se declare inadmisible, pero la nueva composición de la Cámara estimó lo contrario, aquí hay que ponerse serios (…)».

Rincón: «Desde el punto de vista ecológico, el arrastre produce daño pero la potera no; la ciencia ha establecido que la pesca de arrastre no discrimina el tamaño de la jibia. La dimensión ecológica muta de la extracción de gran volumen a una de menor, pero con valor agregado. La dimensión social protege la captura en menor escala como un sustento imprescindible para la pesca artesanal. En cuanto a un supuesto riesgo para las plantas que se ha levantado, no es efectivo».

Lagos: «La jibia fue una pesquería refugio para la pesca artesanal que concentró en ella buena parte de sus esfuerzos. (…) Este proyecto no se pronuncia sobre las cuotas, que es un tema pendiente, sino que regula ‘cómo pesco una jibia’ y esto tiene un efecto más selectivo a la hora de capturarla, genera menos daño al medio ambiente, entonces se ordena un sistema de pesca que tiene un impacto ambiental y da señal a la pesca artesanal que requiere este apoyo».

Muñoz: «Cuando proponemos que la captura se restrinja a potera y línea de mano y prohíbe cualquier otro tipo, nos indica -no ha invocar tribunales constitucionales- sino que nos debe invocar a pensar en el país que estamos construyendo, qué desarrollo queremos, qué crecimiento queremos. ¡No cualquier tipo! Cuando los pescadores artesanales nos plantean que sean solo potera y línea de manso nos están diciendo que tenemos que desarrollar una actividad sustentable».

Chahuán: «Esta discusión está llegando tarde, la jibia -por la condición climática y calentamiento del agua- se está yendo al sur (…). Me tocó trabajar con los pescadores artesanales en el acuerdo 80/20 y asegurar la cuota de los pescadores artesanales y es por eso que creo que este proyecto va en la línea correcta y lo voy a votar a favor. (…) Esta, que era la maldición de las caletas, se transformó en la bendición que da el pan de cada día».

Recursos naturales: Un tema pendiente

Guillier: «Este es un proyecto que no excluye a la pesca industrial sino que protege la sustentabilidad de un recurso que ha resultado rentable para la pesca artesanal que es el sector que genera más empleo. Además se evita depredar recursos y no afectar el empleo… A diferencia de otros países que cuidan sus recursos naturales en Chile quedan sujetos al mercado».

Pugh: «Tenemos que administrar este recurso que ha venido a salvar muchas familias. Estimo que el Estado no ha sido capaz de estar a la altura de las circunstancias se requieren al menos cuatro buques de investigación y es más incluso, los artesanales pueden contribuir a custodiar nuestros recursos. Esperamos que en el debate en particular se pueda perfeccionar esta iniciativa».

Allende: «En algún momento tenemos que ver con detención qué vamos a hacer con nuestro recurso: vamos a seguir con 7 familias a cargo de los recursos pesqueros o vamos a ser más racionales con nuestros recursos naturales sometidos a cambios climáticos y a la depredación. Como país tenemos que ir terminando con la pesca de arrastre y avanzar en proteger los recursos».

Latorre: «Lo que sucede con la pesca es un reflejo de cómo es Chile, donde el mar se lo entregamos a unos pocos en desmedro de los artesanales. Somos una sociedad con una alta concentración de la riqueza y una economía extractivista que no se preocupa de los recursos… Este proyecto es valorable porque apunta a evitar la depredación de recursos hidrobiológicos.

Ebensperguer: «Creo que se requieren estudios científicos más concluyentes sobre los efectos de la pesca de arrastre, así como la pesca de jibia, puesto se señala que el sistema de potera sería más selectivo, pero hay otros estudios que hablan que la pesca de la jibia hembra sería más nocivo. Por lo mismo resulta imprudente adoptar medidas tan radicales más aun cuando la actual ley contempla mecanismos administrativos para evitar las falencias«.

Pesca artesanal: Un patrimonio

Navarro: «Cuando discutimos la ley de cuotas, allá por el año 2000, ya lo sabíamos, era la jibia la que se comía el jurel, aquí se ha abusado de los recursos (…). Este proyecto busca terminar con el arrastre, condenado en la mayor parte del mundo, la pesca de arrastre ha sido definida como depredadora. (…) La jibia se reproduce una sola vez, no conocemos su ciclo en las aguas chilenas, tenemos muy poco estudio, por lo que debemos tener la mayor precaución y eso lo permite la pesca con potera. Este proyecto nos permite abrir un debate necesario».

Elizalde: «La Ley de Pesca no protege la pesca artesanal, desconociendo su concepto de pesca sustentable. Todos sabemos el impacto de la pesca de arrastre ¡Es hora de actuar! Si seguimos de brazos cruzados nos vamos a arrepentir por el daño que le estamos causando a las nuevas generaciones. Me llama la atención los argumentos que se esgrimen en materia constitucional para evitar que entre en vigencia. La pesca artesanal es una forma de vida, un patrimonio necesario de preservar».

Prohens: «Voy a votar a favor, pero eso no quiere decir que no tenga dejos de inconstitucionalidad. No voy a ir al Tribunal Constitucional, pero esto debiéramos resolverlo en la Cámara y en la Comisión de Constitución, que pudiera dirimir, para votar el día de mañana en forma más tranquila y dar mayor tranquilidad a los propios pescadores artesanales».