Los integrantes de los comités de manejo de merluza austral y congrio dorado manifestaron su oposición y preocupación por la forma en que se tramitó un nuevo parque marino en la región de Magallanes y de la Antártica Chilena. Además, hicieron saber su rechazo a la propuesta de parque marino presentada por Nat Geo y esperan que el Gobierno genere mayores instancias de participación.
Al respecto, solicitaron a la Subsecretaría de Pesca y Acuicultura (Subpesca) y al Ministerio del Medio Ambiente (MMA) socializar con las comunidades del sur los fundamentos de la propuesta de parque marino de Cabo de Hornos y Diego Ramírez que está trabajando el Ejecutivo y abordar los efectos económicos y sociales que tendrá.
«El acceso a la información de este parque marino ha sido escaso. Recién conocimos una propuesta del Gobierno en el mes de octubre, pese a que la Presidenta Bachelet lo anunció a principios de junio. Es un proceso muy complejo que requiere una mayor transparencia y claridad, pues si se aprueba de la forma como se está tramitando será perjudicial para todo el sector pesquero del sur austral», aseveraron desde ambos comités.
Durante la sesión realizada en la ciudad de Puerto Montt, región de Los Lagos, este miércoles 8 de noviembre, los integrantes del sector pesquero artesanal e industrial aseguraron que no están en contra de las medidas de conservación marina, pero sostienen que es un mal precedente que la decisión se haya tomado sin antes analizar el impacto económico y social que genera cerrar esta gran área a las actividades pesqueras.
Con el diseño propuesto por el sector público, de acuerdo con los comités de manejo de merluza austral y congrio dorado, se afecta seriamente la actividad pesquera de la zona sur austral, ya que el área donde se pretende establecer el parque marino se superpone con importantes caladeros de pesca de bacalao de profundidad, merluza de cola, merluza de tres aletas y merluza austral y colisiona con las rutas de navegación hacia las actividades que se desarrollan en la Antártica. Además de afectar a zonas de extracción de centolla y congrio dorado.
El dirigente de la pesca artesanal de Punta Arenas, Juan Francisco Lemus, solicitó que se organice una reunión ampliada en la región de Magallanes pues, según dijo, se afecta a la pesca artesanal y a cerca del 20% de las aguas de la zona. «Nos gustaría que las universidades y las ONGs (organizaciones no gubernamentales) que arman estas propuestas se junten con los pescadores para saber qué es lo que quieren hacer y cuáles son sus argumentos», expresó Lemus. Por su parte, Fernando Carmona, presidente del Sindicato N°8 de Armadores Artesanales de Punta Arenas, se mostró «absolutamente en contra de esta de propuesta» e insistió que «es un problema regional y se debe analizar localmente con todos los actores».
Por su parte, Carlos Vial, presidente de la Federación de Industriales Pesqueros del Sur Austral (Fipes), sostuvo que es «necesario escuchar y analizar el impacto en las distintas actividades que se ven afectadas y que repercuten en los pescadores artesanales e industriales, tripulantes y trabajadores de plantas de proceso, debiendo integrar el impacto de toda la cadena productiva».
Para continuar el trabajo que crea el parque marino, los miembros de dichos comités solicitaron la presencia de los equipos directivos de las instituciones del Estado involucradas, asegurando que hasta ahora ha sido solo la Subpesca la que se ha relacionado con ellos.
Finalmente, solicitaron hacer llegar a los ministros de Economía, Medio Ambiente, Defensa y al canciller estas preocupaciones, y generar espacios para debatir sobre el impacto específico que tendrá la implementación de un parque marino en la actividad pesquera en las zonas del sur austral.